A todos nos gusta estar a la última, vestirnos bien e ir a la moda o por lo menos ir con prendas con la que nos sintamos a gusto. La ropa es nuestra segunda piel, es por eso que le dedicamos mucho tiempo a la hora de elegir qué nos vamos a poner -unos más que otros, claro está- todos los días.
Hay diferentes tipos de looks, no es lo mismo ponerse ropa de deporte para salir a hacer running por el paraje natural de Montegancedo que ir a una cena con tu pareja por la noche. Es por eso que nuestros armarios tienden a estar divididos por partes: estaciones del año, eventos, día a día o, como comentábamos anteriormente, para hacer deporte.
Hasta aquí todo normal, pero lo que seguramente no sabías es que ir a la moda no está reñido con cuidar el medioambiente. La sostenibilidad está cada vez más presente en los hábitos diarios: transporte, gastronomía, trabajo, hogar y, por si no lo sabías, en la ropa que te pones.
La prenda más sostenible es la que ya existe. Cada vez existen más tiendas físicas y online que apuestan por la ropa de segunda mano. Prendas que tú, por el motivo que sea, dejaste de ponerte pero que todavía pueden ser utilizadas. Hay muchas opciones para encontrar este tipo de prendas, en la actualidad se han creado bastantes ecommerce que se dedican a comprar ropa de segunda mano para rehabilitarla y venderla ellos mismos.
También cabe la posibilidad de que tú mismo reinventes o rediseñes esas prendas y les des una nueva vida. Por ejemplo, una camiseta de manga larga que utilizabas en otoño la puedes convertir en una camiseta de tirantes que puedes utilizar en época estival. Más económico y sostenible, imposible.
Los productos naturales son más caros pero su vida y uso son más prolongados. Las prendas que utilizan algodón orgánico son 100% ecológicas y además son muy recomendadas para pieles sensibles.
Existen otros productos naturales como la seda, seda de platanero, bambú, cáñamo o el lino en la que las grandes marcas basan sus colecciones.
¿Qué es el certificado GOTS y por qué es tan importante?
Hay prendas que están hechas con tejidos ecológicos certificados GOTS, libres de crueldad animal y apto para veganos. Cada vez es más usual encontrarte este certificado en la ropa, pero ¿qué significa y por qué es tan importante?
GOTS son las siglas de Global Organic Textile Standard; su traducción sería ‘Norma Mundial de Textiles Orgánicos’. Es el estándar por el cual se aprueba que los tejidos y los textiles están hechos de fibras orgánicas. Solo los textiles fabricados con al menos un 70% de fibras orgánicas pueden obtener este tipo de certificación.
El objetivo del GOTS es definir y dejar claros los requisitos reconocidos a nivel mundial que aseguran el estado orgánico de los textiles, desde la recolección de las materias primas, incluyendo la fabricación responsable desde el punto de vista ambiental, social y hasta el etiquetado para proporcionar una garantía creíble al consumidor final; es decir, su mirada está puesta en generar confianza y transparencia de toda la cadena de proveedores
Los procesadores y fabricantes de textiles están habilitados para exportar sus telas y prendas orgánicas con una certificación aceptada en todos los mercados principales.
Por último, centrándonos en los precios de la ropa ecológica, quizás te invada la duda después de leer el post de si su precio es muy elevado: sí y no. Me explico, hay un dicho que afirma que lo barato termina siendo caro. La ropa con la etiqueta GOTS puede ser un poco más cara (no siempre) pero a largo plazo es mucho mejor porque su calidad también es superior y esto hace que su duración sea más alta.
Para terminar, se suele decir que la gente se viste como piensa. Sabemos que estás concienciado con la protección del medioambiente, por lo tanto, decídete por la ropa sostenible.